Son hechos reales, vividos en relación al trabajo, sobre los que el autor agrega su punto de vista. Nunca categórico, siempre discutible. Pasan por aquí más de doscientas historias aportadas por mujeres y hombres que ocupaban distintas posiciones laborales. Fue necesario seleccionar los temas a partir del interés que puede despertar al lector en general, la excepcionalidad del caso o la frecuencia con que se presentan en las organizaciones laborales. Todos los nombres fueron cambiados, para preservarlos del riesgo de la exposición pública al divulgar sus situaciones. Nunca falta un detective aficionado o un vengador compulsivo que se sienta damnificado e intente perjudicar de algún modo al protagonista del relato.

Los lectores se encontrarán, en estas páginas, con esos hombres y mujeres de carne, hueso y alma, bastante diferentes respecto de los estereotipos de fácil venta en los quioscos del marketing empresario. Pero la tarea que aún queda pendiente es formidable. Dentro y fuera de las empresas, hay por lo menos dos vertientes, la historia oficial y todas las otras. Aunque corren paralelas, despliegan una geometría particular. Muchas veces se tocan, se entrecruzan o superponen.